jueves, 26 de febrero de 2009

domingo, 22 de febrero de 2009

Principio del capítulo III

-Dulce-Persona: ¿Qué va a suceder pronto en la novela, Quiza-genio?
-Quizagenio: Te lo diré cuando yo sea el autor.
-Dulce-Persona: ¿Y después qué seguirá?


De "Museo de la novela de la eterna", Macedonio Fernández.

lunes, 16 de febrero de 2009

Quod erat demostrandum

Sean A y B dos móviles, distantes entre sí algo, el equivalente a doce pianos de cola, por ejemplo. A y B serían idénticos si uno no se llamase A y otro B. A y B son sólo un paradigma del principio de no contradicción. Si A, entonces no B, y viceversa. Ya me entienden. A A le gustaría dejar de ser A. A no sabe que a B le ocurre lo mismo. En un momento dado, ambos móviles salen en direcciones opuestas. Su destino, eso no está muy claro todavía, quizá sea el de encontrarse. Algo sospechan. Por eso se pusieron en movimiento. A y B son observados por una cantidad indeterminada de gente (éste será un problema con público). A y B cumplen una función sociológica. Con esto quiere decirse que hay quien apuesta por A y hay quien lo hace por B. El motivo de la apuesta no está muy claro, ya que entre A y B no se ha establecido ningún tipo de competición (ninguna evidente, al menos). Pero eso no importa. Yo voy con A. Tú vas con B. No me preguntes por qué. Algo que ayuda a mantener el orden social. El equilibrio, digamos. A A y a B les separan tan sólo seis -acaso siete- pianos de cola. A, a su pesar, se siente cada vez más A. Algo que también le ocurre a B. El público no comprendería que A dejara de ser A para convertirse en otra cosa, ni siquiera en algo tan bonito como una alondra. De B opinan otro tanto. A y B no pueden decepcionarlos. Siguen su camino. Si rectificaran sus trayectorias pasarían el uno junto al otro, de largo, a la distancia suficiente para saludarse como quien se obliga a un compromiso. Pero no se deciden. Las reglas del problema son estrictas. Ya sólo hay un piano de cola entre ellos, entre A y B, a punto ya de configurar, si no una palabra, al menos un prefijo: AB, algo que sirva para las abscisas, para absolver, la partícula necesaria para lograr el absoluto. Ya están a punto de rozar sus narices. Casi. Hasta que ocurre. El momento esperado. La solución al problema. Chocan. Se produce el estallido. Las palmas de las manos del público ni siquiera tienen tiempo de caer la una sobre la otra para prorrumpir en un aplauso. La explosión extiende súbitamente sus llamas. Todo queda calcinado. En un instante. Sólo queda ceniza.

Quod erat demostrandum.

viernes, 13 de febrero de 2009

ARCO 09

Ayer estuve en ARCO. Reconozco que era mi primera vez. ARCO es sorprendente. A mí me sorprendió. Es como un sueño, donde uno está rodeado todo el tiempo de obras de arte. Como hacerse diminuto e introducirse en una extraña casa de muñecas. La típica pregunta que a uno le hacen y que uno se hace después de salir de la Feria es... ¿Y qué tal? A uno la dan ganas de responder(se) eso tan francés de c'est mal posée la question. Es como si tras el último suspiro uno tuviese que responder un cuestionario (me imagino a San Pedro como uno de esos banners con patas que pululan por la calle Preciados y que te asaltan con la intención de que respondas a alguna pregunta o de que ingreses en cualquier asociación) acerca del grado de satisfacción durante nuestro paso por la existencia. Pues que hubo de todo, oiga. Bueno y malo. Cosas sorprendentes y otras tan convencionales como un ladrillo del nueve. Eso sí, vi a Tita Cervera (que se paseaba entre las obras de arte como yo entre los estantes del DIA), vi a las azafatas del pabellón de El País (de lo más hermoso de la Feria, las azafatas, digo), vi salas VIPS donde sólo podías entrar si mostrabas un pedigrí en forma de acreditación. Tomamos una cerveza en la cafetería del pabellón ocho (¿o era el seis?) y allí, mientras hacía negocios, mi amigo Jorge levantaba de vez en cuando su cerveza y brindaba a voz en grito: "por vosotros, caraduras". Algún galerista o artista levantaba entonces su rostro por un momento del café o del sándwich mixto y miraba la escena, intentando no darse por aludido. Fue entonces cuando cogí el folleto de Performing Mango y lo tiré a la papelera. Aparte de la performance de Jorge lo que más me gustó (o lo más memorable, hasta este momento), fueron las obras de Ori Gersht. El tipo, fotógrafo y videoartista, hace cosas como éstas. Una perfecta mezcla de tradición y contemporaneidad. Un juego de anacronismos que a mí, lo reconozco, siempre me pone mucho.


martes, 10 de febrero de 2009

Pareja de ases




He aquí dos libros excelentes y que a mi juicio no debieran pasar desapercibidos (dando por sentado que la poesía ya pasa por sí sola bastante desapercibida). Se trata de Viaje a la mansedumbre, de Juan José Rodríguez, y de La flor de la tortura, de Raúl Quinto. Juan José practica una poesía heredera de la de Wallace Stevens, una estela que sólo puede seguir un poeta aguerrido y de solidez contrastada. Raúl investiga (siguiendo de alguna manera los pasos de Baudelaire) los nexos entre la belleza y la muerte en un libro que sortea con acierto los riesgos de la temática. Estamos ante dos muestras -diversas- de calidad de nuestra poesía actual en castellano.



CAMARA OSCURA

Una fotografía en blanco y negro
muestra un cadáver
con los ojos abiertos,

te mira fijamente,

como aquellos retratos de Van Dick
que escrutaron tu alma
entre las llamas del museo;

son las mismas pupilas
descendiendo
hasta el no más allá
de tu aliento,
el mismo corazón decapitado
latiendo sin sentido
sobre la mesa del quirófano,

pero tú eres otro.

En la frontera de ti mismo
te acercas y me dices:

"Es la caligrafía del dolor
quien nos escribe,
mira mis ojos
y encontrarás un túnel para el odio".

Miro tus ojos y comprendo.

La belleza es la muerte.

(De La flor de la tortura)


ARGENTINA 1978 (SECUENCIA)

Cables que atan las muñecas
y los tobillos al acero,
que conectan la máquina del grito
mientras la luz desnuda su epilepsia
y los cuerpos a oscuras

rozan la inexistencia
por un instante.

Estas son las pupilas que te miran.

Una flor de penumbra
extiende la cuchilla de sus pétalos
sobre la lengua que nos dice.

Y digo que su aroma es este poema.

Y escribo que el dolor abre sus manos.

(De La flor de la tortura)


FANTASÍA DE LOS MUCHACHOS IRREALISTAS

Como la rueca que hila el cordón de las horas,
las imágenes cumplen tareas invisibles.

Así, la orquídea ardiente
sobre las manos de la niña despierta.
Así, el eclipse lunar
que mancha tu ventana para siempre.
Así el fragmento de hielo
coronando la última estrella fugitiva.

Sólo que yo no diferencio, tan inútil,
una imagen cualquiera del viento que atraviesa
el trigal amarillo y el bosque sin la luna.

Una imagen escrita es lo único real:
en el aire dibuja sus caminos de fuerza.
La fábula es visible si la tientas.

(De Viaje a la mansedumbre)


HILACHA DEL TIEMPO

En la memoria,
tránsito de la luz nunca heredada,
no caben alfileres o pájaros:
no cabe nada
que tenga nombre
o perfil consumado en la tierra.

Sólo el olvido, con su aroma a distancia,
no engaña al pensamiento.

(De Viaje a la mansedumbre)

jueves, 5 de febrero de 2009

Sucesión divergente de iteradas (o cómo el sueño de la telecomunicación produce monstruos)

He aquí un ejemplo de cómo un hecho real, triturado y difundido mil y una veces, puede llegar a culminar en el absurdo. Un ejemplo práctico de aquello que Baudrillard llamaba la desaparición de lo real.

Hace unas semanas...
1.- Nieva en Madrid. Un hecho natural, espontáneo y absurdo, como todo lo que acontece en la naturaleza.
2.- Yo tengo que darme lavuelta porque no puedo llegar al trabajo. Frente a mí hay un coche con una matrícula muy literaria. Hay atasco a la vuelta, pero no me importa. Leo los sonetos de Shakespeare (bartleby, 2009) y escucho a Cristina Rosenvinge (Tu labio superior).

3.-Ana Botella dice que es invierno y que nieva.
4.-Barajas se colapsa.
5.-El gobierno regional le echa la culpa al gobierno nacional.
6.-El gobierno nacional le echa la culpa al gobierno regional.
7.-Alguien dice que falló la predicción meteorológica.
8.-Ayer: aviso de nevadas. No nieva.
9.-Hoy: aviso de nevadas. No nieva.
10.-Partidazo de Gasol.